Manhattan
La Productora 
“Manhattan”, la obra maestra de Woody Allen, despliega la vida tumultuosa de Isaac Davis, un neoyorquino en la encrucijada de sus relaciones y su carrera. La película, considerada una de las más importantes del prolífico guionista y director, encapsula el distintivo estilo narrativo que marca la trayectoria de Allen. En su esencia, la película expone la esencia misma del cine de Allen, tejiendo diálogos perspicaces que debaten sobre la vida y presentando una visión vital de la existencia.
En este filme, Allen no solo entrega su característico despliegue de ingenio verbal, sino que también ahonda de manera única en los enredos amorosos y las complejidades de amar y ser amado. Aunque sus giros de guion sean familiares para los seguidores del cineasta, su impacto perdura, especialmente en el clímax revelador de la trama. La película, en esencia, invita a reflexionar sobre el pasado, a contemplar la vida con una mirada introspectiva, y a evitar perderse en los recuerdos. Este enfoque proporciona un complejo rompecabezas emocional, que sigue siendo la firma distintiva de Allen.
Los personajes meticulosamente construidos en “Manhattan” se apartan de la superficialidad y se presentan con una autenticidad y complejidad que caracterizan las obras del cineasta. La habilidad de Allen para retratar los claroscuros sentimentales con realismo y cotidianidad es evidente en cada escena. Esta profundidad en la caracterización es uno de los motivos por los cuales las películas de Allen son tan apreciadas; permite a los espectadores conectarse con los personajes en un nivel más íntimo.
No obstante, aunque la película ostenta un guion notoriamente hábil, no está exenta de las críticas que rodean a las obras de Allen. Su propensión a diálogos extensos y cargados de referencias, si bien contribuyen al desarrollo de la trama, a veces amenaza con desequilibrar la película en términos cinematográficos. La reiteración de patrones y la falta de equilibrio con la acción pueden ralentizar el flujo de las secuencias, dando lugar a momentos que, aunque ricos en contenido, pueden parecer estáticos en su representación visual. Sin embargo, esta observación no compromete la innegable calidad del guion y su capacidad para capturar la esencia humana. A pesar de las críticas sobre la estructura narrativa, la película deja una impresión duradera, encapsulando la habilidad única de Allen para explorar la complejidad de las relaciones y la inevitabilidad de enfrentar el pasado en el camino hacia la autorreflexión y el crecimiento.
Fuente:
https://elpelado.com.ar/
Para ANUNCIAR Informa (AI)
Desde España
Jorge José López
-Este artículo está publicado en el boletín digital, número 50, que corresponde al mes de Enero de 2024.
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