Para los jóvenes millennials, 1985 suena como un pasado remotísimo, casi un mundo diferente. No es para menos, en esa época el orbe todavía vivía en medio de la Guerra Fría, los regímenes dictatoriales eran el pan nuestro de cada día y la mayoría de los niños sólo tenían un Atari para jugar.
A pesar de que la película compartió año de estreno con otras muy buenas cintas, como los Goonies de Richard Donner, The Color Purple de Steven Spilberg, Brazil de Terry Gilliam, Cocoon de Ron Howard, Legend de Ridley Scott, o Mad Max 3 de George Miller, esas cintas (a pesar de su calidad y seguir siendo recordadas) no alcanzaron el nivel entre el gusto del público masivo que alcanzó la cinta de Robert Zemeckis, la cual ha sido homenajeada en múltiples series y referenciada de mil formas posibles en todos los medios.
Bob Gale, el guionista –junto con Robert Zemeckis– de la película, indicó que la idea original de Volver al Futuro le llegó a la cabeza cuando, sin querer, revisando el anuario de la preparatoria de su padre, descubrió que su papá había sido el presidente de su clase. Gale recordó que no se llevaba bien con el presidente de su propio salón, por lo que se quedó pensando si su padre y él se habrían llevado bien si ambos hubieran asistido a la misma escuela, al mismo tiempo, cuando tenían la misma edad.
Robert Zemeckis se inspiró en varias fuentes para la idea original de Volver al Futuro, una de ellas eran los cómics de Superman de los cincuenta y sesenta, en los que se contaban extrañas “Historias imaginarias” (el antecedente de los Elseworlds). Siguiendo la estructura de estas historias, en las que siempre ocurría un hecho muy estrambótico (como Superman conociendo a sus hermanos que nunca existieron), Zemeckis redactó la premisa inicial de la cinta tal y como se la había contado Gale, con una sencilla pregunta que imitaba las que aparecían en los cómics: “¿Qué pasaría si yo conociera a mi padre cuando él tenía mi misma edad?”.
Corey Hart fue un fuerte candidato para ser Marty McFly, fue invitado al casting de la cinta por el mismísimo director, pero el cantante canadiense del momento se negó a audicionar para el papel, quedando fuera de la producción desde el inicio.
Erick Stoltz fue elegido para interpretar originalmente a Marty McFly. Después de 5 semanas de filmación Stoltz fue reemplazado por Michael J. Fox, quien aceptó dividir su tiempo entre la película y Family Ties, una popular serie en la que trabajaba. Zemeckis ha dicho que Stoltz hizo bien su trabajo, pero le faltaba el toque de humor que Michael J. Fox aportó a la cinta.
Otra de las principales fuentes de inspiración para la película fue el cuento de Ray Bradbury de 1952 A Sound of Thunder, historia que también inspiró un capítulo de Los Simpson. En el cuento de Bradbury un viajero en el tiempo del año 2055 viaja a la prehistoria para cazar dinosaurios, advertido de que debe ser muy cuidadoso de dejar todo como lo encontró, debido a que el cambio más leve puede provocar importantes alteraciones en el futuro. Zemeckies y Bob Gale, ambos guionistas de la película, eran fans de este cuento.
Varias jóvenes celebridades de los ochenta audicionaron para el papel de Marty McFly, incluyendo a la estrella en ascenso Ralph Macchio, en ese entonces aclamado por su papel de Daniel Larusso en Karate Kid. Uno de los finalistas para interpretar al protagonista de la película fue C. Thomas Howell, uno de los niños que aparece en E.T. Johnny Depp y John Cusack también realizaron el casting, pero fueron rechazados en etapas tempranas de la selección.
Antes de que Christopher Lloyd obtuviera el papel, la producción quería a John Lithgow (3rd Rock from the Sun) para el papel, lamentablemente para el actor, Lithgow se encontraba comprometido con la intrascendente SantaClaus: The Movie. La segunda opción fue el actor Jeff Goldblum, iniciando una negociación con su representante que se vio interrumpida cuando Neil Canton, productor de la película, le sugirió a Zemeckis que probara con Lloyd.
Una de las primeras formas en que Zemeckis y Gale imaginaron que Marty viajaría hacía el pasado sería en un viejo y enorme refrigerador de los 50, que el Doc adaptaría como una máquina del tiempo. Zemeckis decidió desistir de está idea porque pensó que los niños podrían pensar que lograrían viajar en el tiempo si se encerraban en los refrigeradores de su casa, lo cual consideró peligroso.
En la cinta se puede ver por primera vez en pantalla grande al joven Billy Zane, quien interpretaba a uno de los secuaces de Biff. Después el actor aparecería en más series y películas, como en Twin Peaks y en el papel de Caledon Hockley (el prometido de Rose) en Titanic.
Después de descartar la idea de usar el refrigerador, Zemeckis y Gale llegaron a la conclusión de que lo mejor era usar un auto como máquina del tiempo. Inicialmente pensaron en una especie de tanqueta todo terreno, el cual lógicamente ayudaría cuando se viajaba al pasado remoto no pavimentado. Finalmente se decidieron por el icónico DeLorean DMC-12 por una simple razón, su aspecto futurista ayudaría a sustentar los chistes de la familia de granjeros que lo confunde con un OVNI.
Aunque a estas alturas quizás el dato no sorprenda a muchos, Volver al Futuro fue la película más taquillera de 1985, logrando embolsarse más de 383 millones de dólares en todo el mundo. El presupuesto de la película fue apenas de 19 millones de dólares.
Volver al Futuro fue la película más taquillera de 1985, ningún estudio cinematográfico le veía un auténtico valor comercial cuando Zemeckis y Gale presentaron el proyecto. El guión fue rechazado 40 veces por diferentes estudios. Los dos guionistas cuentan que los representantes de los estudios les decían que la película era demasiado infantil, y les sugerían proponerla a Disney. El estudio rechazó el guión porque consideró que era muy fuerte, por contener insinuaciones relacionadas con un romance entre una madre y su hijo.
Marty McFly tenía 17 años en la primera película, mientras que el actor Michael J. Fox tenía 24 años cuando grabó la cinta. La actriz Lea Thompson, que interpreta a Lorraine, la mamá de Marty, también tenía 24 años. Por su parte Crispin Glover, el papá de Marty, era tres años menor a ambos.
J. J. Cohen fue quien salió airoso después de las pruebas de casting por el papel de Biff Tannen, el bully por antonomasia del cine. A pesar de que Cohen era muy bueno para interpretar el papel de bravucón, su tamaño no lo hacía ver tan impresionante. La producción decidió quitarle el papel y dárselo a Thomas F. Wilson y relegar a Cohen a un papel menor como uno de los miembros de la pandilla de Biff.
En el guión original, Einstein, la mascota del Doc Brown, iba a ser un chimpancé. Pero Sid Sheinberg, directivo de Universal, le dijo a Zemeckis que ninguna película donde apareciera un chimpancé había tenido éxito, así que sugirió que usarán a un perro en lugar de a un simio. Así lo hicieron.
El científico loco buena onda no era del agrado de Christopher Lloyd al inicio, de hecho el actor rechazó el papel cuando se lo ofrecieron. Sin embargo, cambió de parecer cuando leyó el guión terminado. De acuerdo con el actor, para dar vida al Doc Brown se inspiró en el científico Albert Einstein y el compositor Leopold Stokowski, ambos con cabelleras alborotadas.
El grupo Van Halen no aceptó que se usara su música en la escena en que Marty McFly obliga a George a invitar a Lorraine al baile. Sin embargo, el guitarrista Eddie Van Halen no tuvo problema en grabar un solo de guitarra que se uso en esa parte de la película, por eso el casette que introduce Marty en su walkman tiene la inscripción Edward Van Halen.
Zemeckis no pudo evitar hacer una juguetona doble referencia a las dos sagas de ciencia ficción más importantes del entretenimiento. En la escena comentada en el punto anterior, Marty se disfraza como un extraterrestre que se llama Darth Vader, con todo y su característica respiración, que viene del planeta Vulcano (el planeta de Mr. Spock), añadiendo el clásico saludo de esa raza del universo de Star Treck.
La escena anterior era más larga en los primeros cortes de la cinta, en ella Marty usaba una secadora para atacar a su padre y escuchábamos más de la guitarra de Eddie Van Halen. Además de drogarlo con cloroformo para que volviera a dormir después de fastidiar su sueño.
El éxito de la película llevó a Volver al Futuro al NES de 8-bits, lamentablemente el juego era una basura, considerado como una de las peores adaptaciones de la historia de los videojuegos. A pesar de tener la licencia de la película, el juego no usaba la icónica música de la cinta, y era repetitivo a más no poder. La “aventura” consistía en ir caminando por la calle recogiendo relojes y evitando peligros, como alcantarillas abiertas, abejas o bancas públicas. En otra misión debes de lanzarles malteadas a los enemigos para mantenerlos alejados, y en una más capturar los besos que te manda Lorraine… una completa basura.
Una de las invitadas a la premier de Volver al Futuro en Londres fue la princesa Diana, a quien se puede ver en la foto saludando a la esposa de Steven Spielberg. En la secuela hay una escena en la que Marty toma un periódico de USA Today, que en la esquina superior derecha dice: “Washington se alista para la visita de la reina Diana”. Lamentablemente, la princesa Diana falleció en 1997, unos 18 años antes de la fecha en la que Marty McFly viaja al futuro.
Al inicio de la película, el Doc Brown prueba por primera vez el DeLorean en el estacionamiento de un centro comercial llamado “Twin Pines Mall” (El centro comercial de los dos pinos). Luego Marty va al pasado y accidentalmente derriba un pequeño pino, algo que parece no tener importancia hasta que al volver al futuro, se ve que el letrero del estacionamiento cambió a “Lone Pine Mall” (El centro comercial del pino solitario”).
En los primeros borradores, se planteó que Marty necesitaría el poder de una explosión atómica para viajar en el tiempo. Zemeckis le propuso a Universal que podían grabar en el desierto de Nevada, adaptándolo para que, en el clímax de la historia, Marty llegara en medio de una prueba atómica que lo llevaría de vuelta al futuro. El estudio rechazó esta parte del guión porque la consideró demasiado cara de filmar. Zemeckis y Gale tuvieron que volver a adaptar el guión para resolver el problema del viaje en el tiempo con la caída de un rayo y sus 1.21 gigawatts.
Sid Sheinberg, ejecutivo de Universal Pictures, sugirió en algún momento cambiar el título de la película por Spaceman from Pluto (El Hombre Espacial de Plutón), pues le parecía que Volver al Futuro no era algo muy atractivo ni comercial. El nombre se quedó tal cual, pero incluyeron una pequeña broma en la escena en la que el niño de la granja a la que llega Marty saca un cómic llamado Space Zombies from Pluto.
Hay una escena en el garaje del Doc Brown en la que se puede ver un amplificador que tiene una etiqueta roja en la que dice “CRM 114”, el mismo nombre de una pieza de radio en la película Dr. Strangelove de Stanley Kubrick.
Todos recordamos la parte en la que Marty comienza a tocar la guitarra junto con la banda de Marvin Berry, quien queda sorprendido por la música y, de inmediato, llama por teléfono a su primo Chuck, para de decirle que ya encontró el sonido que estaba buscando. Lo interesante es que la canción que está sonando es Johnny B. Goode de Chuck Berry, así que, en otras palabras, Marty McFly inventó el rock and roll.
Cuando Marty le dice al Doc que el presidente de Estados Unidos en 1985 es Ronald Reagan, el científico responde: “¿Ronald Reagan? ¿El actor? ¿Entonces quién es el vicepresidente? ¿Jerry Lewis?”. A Reagan le gustó tanto esa referencia, que luego en un discurso oficial se le ocurrió citar una frase de Volver al Futuro: “A donde vamos no necesitamos caminos”.
A pesar de que el final deja la puerta abierta para una secuela en el futuro (como sucedió en 1989), originalmente no estaba planeado que Volver al Futuro tuviera una continuación. Según el propio Robert Zemeckis, el auto volador del final “era una broma”, pues pensaban que sería algo muy difícil de hacer. Pero, después de que la película se volvió un éxito mundial, Hollywood pidió que se hiciera Volver al Futuro II… y el resto es historia.
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Desde España
Jorge José López
-Este artículo esta publicado en el boletín digital, número 31, que corresponde al mes de Junio de 2022.