Series
EL SANTO
Serie de TV (1962-1969). 6 temporadas. 118 episodios.
Simon Templar (Roger Moore) es un hombre rico, apuesto, sofisticado y culto que decide convertirse en un Robin Hood moderno, cumpliendo el papel de ladrón bondadoso y héroe de los desfavorecidos. Aunque sus métodos a menudo poco ortodoxos pone en algunas dificultades a las autoridades policiales.
Fue una de esas series para el recuerdo que además era tolerada para menores, con lo que podíamos verla sin problemas. De todas formas la violencia de la serie era de lo más ingenua: El Santo peleaba con elegancia, un directo a la mandíbula y un golde kárate en la nuca del malo que caía sin más, rompiendo alguna mesa. El Santo apenas si se despeinaba. Un elegante gesto para ajustarse la corbata y todo solucionado. Y por supuesto siempre había alguna chica atractiva e inocente necesitada de su protección.
Le debemos esta serie a Leslie Charteris, hijo de madre china y padre inglés, aficionado de adolescente a las novelas de caballería y los caballeros de la tabla redonda. A la edad de 20 años (en 1928) escribió la primera novela en la que aparece su personaje de El Santo. Continuó escribiendo novelas y relatos cortos con este personaje como protagonista durante años. Hubo algunos intentos de llevar sus historias al cine que no tuvieron mucho éxito. Finalmente en 1962 dan el salto a la televisión con esta serie británica.
Por su parte el protagonista de la serie, Roger Moore, si bien no tenía unas excelentes dotes como actor, si logró darle a su personaje una perfecta elegancia y sofisticación, de tal manera que cuando leemos su nombre en seguida recordamos a Simon Templar, un perfecto caballero inglés muy acorde con el Londres de la época. Quizás por esta experiencia luego logró ser el actor que más tiempo, y con tanto éxito, interpretó al agente 007, James Bond.
Libro
OPERACIÓN TRUENO
Es la novena novela de James Bond escrita por Ian Fleming. Se creó con el propósito de adaptarla al cine, y está oficialmente acreditada como “basada en una idea de Kevin McClory, Jack Whittingham e Ian Fleming”, un crédito compartido que ha generado mucha controversia. La novela fue publicada en 1961 y es considerada, técnicamente, la primera novelización de un guion cinematográfico de James Bond, a pesar de que cuando fue escrita y publicada aún no se había rodado ninguna película. Poco después se adaptó al cómic, en una tira de prensa que comenzó a publicarse en 1961.
Operación Trueno ha sido objeto, hasta la fecha, de dos adaptaciones cinematográficas. La primera se estrenó en 1965 con el título de Operación Trueno y Sean Connery en el papel de James Bond, y fue la cuarta película oficial de Bond en la serie realizada por Eon Productions. McClory produjo después una nueva versión no oficial, Nunca digas nunca jamás (1983), con Connery nuevamente en el papel de Bond. Estaba inicialmente previsto que Operación Trueno fuese el primer filme de James Bond, en 1962, pero en su lugar se decidió filmar Dr. No debido a problemas legales con McClory.
Películas
PSICOSIS
Alfred Hitchcock lograba cambiar la historia del cine para siempre. El 16 de junio de 1960 se estrenaba en Nueva York “Psicosis”, la obra maestra del cine de terror que cambió la manera de rodar y que sirvió para dar rienda suelta a la creatividad de los directores de cine. Cuando se puso en marcha el proyecto de “Psicosis”, volvieron a sonar todas las alarmas en Paramount. Si una violación les parecía escandalosa, ahora debían afrontar desnudos, travestismos y violencia. Así, la máquina de la censura se puso en marcha. Hitchcock insistió en que podía esquivar los estrictos obstáculos de censura que existían en ese momento y hacer la película, pero los ejecutivos se opusieron al proyecto.
La única manera de que el estudio accediera al rodaje era que Hitchcock renunciara a su caché como director, que ascendía a 250.000 dólares, a cambio del 60 por ciento del total recaudado por la película. Como la productora no creía en el proyecto, aceptó el trato y cometió uno de los grandes errores de la historia del cine. “Psicosis” se convirtió en la segunda película como mayor recaudación de 1960, tan sólo por detrás de la todopoderosa “Espartaco” de Stanley Kubrick, y convirtió en millonario a Hitchcock, que ingresó 15 millones de dólares por su porcentaje de la recaudación.
Una de las escenas más complicadas de la película es la del asesinato en la bañera. Se necesitó una semana para grabarla, una tercera parte de lo que se tardó en toda la película. Los 45 segundos de la escena precisaron 78 configuraciones de cámara y 52 cortes. El montaje, da un ritmo frenético a la escena, que desorienta al espectador con los primeros y rápidos cortes y primeros planos del cuchillo que dan la impresión de que estás viendo cómo apuñalan a la protagonista. Una de las escenas muestra el estómago perforado de Marion. En realidad, colocaron sangre en la punta del cuchillo y la separaron del cuerpo de Marion antes de revertir el disparo para que pareciera que el cuchillo la está atravesando.
La estrategia comercial innovadora de Hitchcock. Como copropietario de la película diseñó la manera en la que debía promocionarse. En primer lugar, rompió la tradición de hacer un pase único para los críticos de cine antes del estreno. Luego prohibió a las personas entrar al teatro una vez que la película hubiera empezado, una costumbre que todavía se utiliza hoy en día.
Para ANUNCIAR Informa (AI)
Desde España
Alfredo Musante
-Este artículo esta publicado en el boletín digital, número 40, que corresponde al mes de Marzo de 2023.